La regulación en el sector hospitality: ¿Una oportunidad para evitar el fraude?

La regulación en el sector hospitality: ¿Una oportunidad para evitar el fraude?

La tecnología avanza a una velocidad vertiginosa y nos abre posibilidades inimaginables hace tan solo unos años. Sin embargo, con las posibilidades también aumentan los riesgos, como podemos ver en el incremento de las ciberestafas en reservas en el sector hospitality. Muchas de estas estafas se dirigen al cliente final, por ejemplo, a través de webs fraudulentas de venta de billetes o reservas de alojamientos que no existen.

Pero las empresas hoteleras y de alojamientos turísticos también son víctimas de intentos de fraude en los canales digitales, como en el caso del fraude de identidad.

Ante este escenario, la normativa está intentando ponerse al día y regular el ecosistema digital de forma que sea un entorno más seguro para clientes y empresas. En España se está implementando el Real Decreto 933/2021, que obliga a las empresas de hospedaje a comunicar una serie de datos sobre sus huéspedes, y cuya entrada en vigor se acaba de posponer hasta el 31 de enero de 2024; la Tarjeta de Registro de Alojamiento (TRA) de Colombia tiene la misma finalidad, regular el sector para hacerlo más seguro.

Estas normativas son mucho más que una simple obligación documental: Son la oportunidad de conocer mejor a nuestro cliente y fidelizarlo, y además son necesarias para prevenir el creciente fraude digital que afecta al sector hospitality.

Los fraudes digitales en hoteles y alojamientos turísticos

El fraude digital es un problema muy real. Los alojamientos se pueden encontrar con reservas online realizadas con identidades falsas y tarjetas de crédito robadas, o con cancelaciones o reclamaciones que les obligan a devolver un importe que en realidad no recibe la persona que lo hizo. Esto es difícil detectar, a no ser que la empresa disponga de un sistema de verificación con biometría al hacer la reserva.

Por ello, el objetivo de la normativa es prevenir o evitar estas situaciones, con un mayor control de los datos que se proporcionan al hacer una reserva. Así, en primer lugar se puede detectar con antelación si la información es falsa o robada, y en segundo lugar la empresa tiene más protección legal ante una incidencia.

El problema con las normativas que hemos mencionado es que muchas empresas de ambos países están teniendo dificultades a la hora de implementar la infraestructura tecnológica necesaria para cumplir con estas obligaciones. ¿Por qué sucede esto? La transformación digital no había sido, hasta el momento, una prioridad para el sector en general. Sin embargo, con este enfoque se están dejando de lado muchas oportunidades de negocio.

Al fin y al cabo, una mayor regulación se traduce en una mayor seguridad para el cliente y la empresa. Es cierto que el incremento del uso de canales digitales también implica una mayor exposición, pero el hecho es que los viajeros son cada vez más digitales. Las soluciones tecnológicas como el check-in online nos permiten ofrecer un mejor servicio ahorrando tiempos de espera al viajero, a la vez que reducimos los costes de gestión de nuestro negocio.

Así, la regulación y la tecnología no deberían percibirse como un mal necesario, sino como una oportunidad para crear un entorno digital más seguro y ofrecer una mejor experiencia a nuestros clientes. Porque, si una cosa es segura, es que los viajeros cada vez utilizarán más los canales digitales en sus viajes, no solo al hacer la reserva, sino durante todo el viaje.

Comparte esta entrada: